La presidenta Cristina Fernández de Kirchner reiteró ayer que el Gobierno tiene “voluntad de diálogo” con las entidades del campo, aunque volvió a cuestionar a los ruralistas que, dijo, no quieren renunciar a sus privilegios.
La Presidenta dijo que la solución debe buscar un equilibrio “La voluntad de diálogo está”, afirmó la jefa del Estado al acceder hablar por Radio 10 con motivo de su cumpleaños número 56, y puso como ejemplo las reuniones entre el ministro Julio De Vido y el titular de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati, que según dijo, trataron de “acercar posiciones”. “Lo que pasa es que dialogar no implica decir a todo que sí. Además, no hay sustentabilidad fiscal ni social si los que mayor rentabilidad tienen no aportan sobre la base de esa rentabilidad; es una cuestión de equilibrio”, recalcó la Presidenta.
Luego, al encabezar un acto en la residencia de Olivos, sostuvo que “hay sectores, pequeños pero muy poderosos, que muchas veces saben que reconocer el derecho de otros significa renunciar a los privilegios, o a una partecita de los privilegios que han tenido, y que se expresa en términos económicos, en rentabilidad para unos y no reconocer los derechos de los otros”.
Servicio.
“Estas cosas cuestan también, no te las perdonan. Pero no estoy para ser perdonada ni para servir a esos sectores que tradicionalmente se han beneficiado del trabajo de otros. Estoy para servir a todos los argentinos por igual”, indicó. No obstante, señaló que “tenemos que tener voluntad para entender la particular situación que vive el mundo” y pidió “un poco más de equilibrio, un poco más de sensibilidad, un poco más de racionalidad en los planteos”, en tanto destacó que “lo importante es intentar el diálogo y hacerlo sin amenazas, sin presiones”.
Reiteró que “a cualquier presidente le gustaría decirle ‘sí’ a todas las demandas”, pero recordó que “vivimos una situación internacional” que no lo permite. Destacó que las discusiones mantenidas hasta aquí facilitaron acuerdos en temas como la carne y la leche, y destacó las medidas adoptadas en cuanto al maíz y el trigo, pero reiteró que debe buscarse un equilibrio que debe partir por un mayor aporte de los que tienen más rentabilidad.
Lamentó que “muchas veces se mezcle la política” en los reclamos, y recordó que “desde hace 15 días que no se habla más de la sequía, y ahora el problema es otro”. “Tenemos que tener voluntad para entender la particular situación que vive el mundo”, volvió a advertir. Finalmente, sostuvo que “todos tenemos que hacer un esfuerzo muy grande y pensar en los millones de argentinos que no tienen posibilidad de discutir sobre la renta, sino si tienen trabajo o vivienda”.
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